jueves, 28 de febrero de 2013

Las mejores galletas del mundo mundial

No os asustéis que esto no se va a convertir en un blog de cocina, pero tras muuuuuuuuchos intentos creo que he dado con la receta perfecta de "cookies" y me parece que estas cosas, hay que compartirlas.
Aquí hacemos galletas casi a diario y tras 5 meses dale que te pego, hemos alcanzado casi la perfección. ¿Os acordais del capitulo de " Friends" en el que Monica hornea y hornea buscando la receta de la abuela de Phobe? ...pues así he estado ya hasta que me he quedado con esta:

Galletas de chocolate que te mueres de buenas

INGREDIENTES

200 gr de mantequilla ( blandita, o bien la sacas de la nevera con antelación o la ablandas en el microondas)
200 gr de azucar moreno
360 gr de harina normal
2 Huevos
2 cucharaditas de café de levadura
2 cucharas de esencia de vainilla
1 cucharadita de postre de canela
1 pellizco de sal
1 paquete de "melts" de chocolate, o en su defecto gotitas de chocolate o una tableta de chocolate con leche normal hecha trocitos.

Precalentad el horno a 180 grados.

Mientras calienta, batid la mantequilla y el azucar. Yo lo hago con la kitchenaid pero antes lo hacía a mano con barillas y también quedan estupendas.

Una vez que se haya hecho una cremita con la mantequilla y el azucar, añadir los huevos de uno en uno, batiendo bien antes de añadir el siguiente.

Añadir a continuación la vainilla, la sal, la levadura y la canela y batid.

Añadir poco a poco toda la harina, batid y por último el chocolate.

Queda una masa pegajosita y un poco difícil de trabajar, por lo que es mejor ponerla en una bolsa de plástico de las de congelar y meterla en la nevera al menos una hora. De hecho cuanto más reposa la masa, más buenas están por lo que si la dejáis un día e incluso dos estarán estupendas.

Haced bolitas del tamaño de albondigas de Ikea y ponerlas en la bandeja del horno, sobre una lámina de silicona o papel de hornear, separadas unos 3/4 cm.

Hornear 15 minutos o hasta que los bordes de las galletas empiecen a dorarse. Es muy importante no exceder el tiempo de horneado porque si no quedarán demasiado duras.

Cuando las saqueis del horno, dejarlas reposar en la bandeja un par de minutos y luego con ayuda de una espatula ( estarán blanditas) pasadlas a enfriar a una rejilla.

La consistencia una vez que enfrían es media, ni duras ni bizcocho.

Espero que las probeís, os limpies las migas del escote y vengais corriendo aqui a decirme cuanto os han gustado :-))


domingo, 24 de febrero de 2013

El día del Fan y otras fiestas

El fin de semana pasado estuvimos en nuestro primer día del Fan.
El equipo de Rugby Union de la ciudad, Los Reds, organizaba un día de puertas abiertas para todos los aficionados y allá que nos fuimos con la tropa.

Los"rojos" ataviados para la ocasión

En el antiguo campo de Los Reds, ahora sede del club, había un montón de actividades para toda la familia .
El equipo al completo estaba allí, a pie de campo y completamente accesibles. Los niños , especialmente N, estaban alucinados ya que a muchos de ellos les conocen de verles por la tele en los partidos de Super Rugby.
La entrada era gratuita y como principales actividades había:

- Una mesa con la mitad de la plantilla firmando autografos. Ellos te regalaban un poster del equipo, firmado por todos y la gente les daba para firmar cosas de lo más variopintas...desde las tipicas camisetas, gorras o fotos, a mantas, mochilas y hasta una nevera tamaño familia numerosa. Muy fuerte.



N e I pidiendo un autógrafo a Radike Samo




- Un entrenamiento para los niños con los jugadores.

  Esto fue lo más alucinante. Pese a que había muchísimos niños de todas las edades, los dividieron por grupos y se lo pasaron fenomenal. Hicieron juegos y también les enseñaron truquillos de placajes y pases entre risas y un clima de mucha paciencia y diversión. N se estuvo pasando la pelota con el segundo capitán del equipo, Will Genia, que le felicitó y todo (como al resto claro, jajaja) y casi no duerme de la emoción. Empezamos a sentir de nuevo el rugby de cerca y nos encanta...lo echábamos tanto de menos.

N e I esperando su turno

Llevando el chirimbolo


Los jugadores saludando a G y J...observese la confianza de G en la quietud de su hermano
- Juegos para niños, con castillos hinchables, gymcanas, sorteos...

Los pollitos al ataque



- Y por supuesto un montón de tenderetes de comida, bebida y merchandaising.

Nos ha parecido una iniciativa estupenda. Que un gran equipo, como son Los Reds, dedique un día especial a sus seguidores, especialmente a los más pequeños dice mucho del espíritu deportivo que siempre impregna todo lo relacionado con el Rugby.

Aunque realmente yo, de lo que más soy fan es, de las madres "listillas".

Esto que os voy a contar es una gilipollez que en absoluto tiene nada que ver con lo anterior, pero como no iba a escribir un post entero sólo pa desahogarme, pues aquí que lo meto.

Al día siguiente de este bonito evento, era día de colegio. Normalmente cuando recojo a los niños, si hace buen tiempo nos solemos quedar un ratito jugando en el parque antes de irnos a casa.
Ese Lunes, N e I estaban jugando con varios compañeros de su clase. Cuando ya estábamos recogiendo para irnos se me acerca la mamá de uno de los amiguitos de N y me pregunta si N quiere irse con ellos a su casa a jugar un rato ya que a su hijo le hace mucha ilusión. A mi me pilla el ofrecimiento un poco descolocada pero ante los mil por favooooooores de N y en aras de su integración aussie accedo, a lo que la mamá en cuestión me contesta muy contenta (en inglés claro, pero traduzco)
" Que estoy yo pensando, que resulta que en mi casa está mi marido trabajando con el ordenador y claro van a hacer mucho ruido y quizá le molesten a si que sería mejor que te los llevases a los dos a tu casa, ¿No te importa?"
Nooooo mujer, que me va a importar........que como tengo yo poco pues otro pal bote....y ademas digo yo, si tu marido está en casa trabajando y no pueden ir, ¿Pues para que leches le invitas?
Ale, ya me ha colocao a su vástago así que resignada reuno a la tropa para irnos a casa cuando su hija la pequeña ( tres añitos) dice mummmmm con tono quejumbroso, a lo que ella muy viva contesta:
" Ainsss pobre, claro ella también quiere ir, pues le da mucha envidia , ¿No te importa llevartela también?"
Noooooooooooooooooooooooooooooo hoooooombreeeee, si yo era justo lo que estaba pensando, como hacer para tener 7 niños esta tarde en mi casa.

Confirmado: tengo cara de gilipollas y hasta en Australia se dan cuenta. De esta si que soy fan.



domingo, 10 de febrero de 2013

Con el médico hemos topado


Hoy E está malito. Lleva con fiebre desde ayer por la noche y probablemente sea un virus pasajero y en dos días esté más alto y como una rosa, pero ya me ha hecho darle vueltas al tema de la visita al médico que tanta pereza me da por múltiples motivos.

Para que entendáis un poco como va este tema os cuento como funciona aquí el sistema sanitario.

En Australia hay una red estatal de sanidad, como nuestra Seguridad Social, que se llama Medicare. Todos los trabajadores están obligados a descontar parte de su salario para su pago y el sistema atiende a todos los ciudadanos con estatus de residente permanente en Australia. ¿Qué quiere decir esto?, pues que los que tenemos otro tipo de visa o nuestro país de origen no tiene convenio con Australia, no tenemos derecho a usarla. También la pagamos (luego, si lo solicitas, al final de año te lo devuelven, pero si no lo pides no) pero si queremos ser atendidos tenemos que pagar por la asistencia o contratar un seguro médico privado.

Por su parte, los australianos tienen sistema de copago y los extranjeros que tenemos seguro privado copagamos las consultas y cualquier tipo de atención médica que recibamos. Es más, primero pagas y luego el seguro ya te reembolsa la parte que te corresponde que suele ser, una mierda, resumiendo.

Desde que hemos llegado, hemos tenido muchísima suerte con los peques porque aún no nos ha hecho falta ir al médico con ninguno de ellos (toco madera), pero si hemos tenido cierto contacto con el sistema sanitario que nos ha hecho darnos cuenta de lo bien que estaba la Seguridad Social española y nuestros seguros privados comparado con esto...aunque al paso que vamos cuando volvamos no se lo que quedará de aquello :-(.

Primera visita

A D lleva meses doliéndole un pie cuando camina un rato, así que decide ir a ver al traumatólogo. 
Primera sorpresa. Pese a que tienes un seguro privado no puedes ir directamente a la consulta del especialista si no que tienes que ir primero a ver al " General Practitioner" que es como nuestro médico de familia y que él te derive al especialista.
D va a la consulta y por el módico precio de 70$ le manda a hacerse unas radiografías.
En el sitio de las radiografías le cobran sólo otros 70$.
De vuelta a la consulta del GP, por otros 70$, este llega a la rumbosa conclusión de que tiene un hueso del píe más desarrollado de lo normal y eso hay que operar y cortarlo...¡toma del frasco carrasco!.
El estupor nos invade y el GP muy cauto decide pedir una segunda opinión y mandar a D al "podiatra", que no es un pediatra mal escrito si no una especie de traumatólogo-fisioterapeuta especialista sólo en pies.
La consulta con este nos cuesta 70$ pero eso si, al menos sabe por donde anda y llega a la conclusión de que no hay que amputar nada y que es un problema muscular. Le pone unos esparadrapos de esos modernos y vuelve aún a otra consulta, es decir otros 70 $.
Resumen por tanto de un pie chungo= 350 $  de los cuales el seguro nos reembolsa unos 175$. Un chollazo

Segunda visita

Mientras estaban los abuelos aquí de vacaciones nos propusimos enseñar a montar a G en bici sin ruedines. De esta ardua tarea se encargó el abuelo que tiene más paciencia que un santo ya que G como ella misma dice " prefiere que charlemos a montar en bici"...eso significa que ella se sube a la bici y no da pedales, pero te va contando lo bonita que es la casa del vecino, aquel pájaro que hay en un árbol...en fin...de todo, menos a lo que estamos. El abuelo que es muy sacrificao corría llevándola por la nuca que mas bien la remolcaba y ella, tan contenta.

Tras varias tardes infructuosas,  el día de Reyes salimos a nuestra calle a montar el numerito de las bicis de nuevo y G ayudada por la ligera pendiente de la carretera consigue por fin coger velocidad y empezar a pedalear sola con el contento abuelo corriendo a su lado...pero tanta dicha no podía durar mucho y G ante la posibilidad de que la vista le empezase a hacer efecto túnel por la velocidad se pone nerviosa y empieza a dar volantazos...el abuelo previsor, ve que se va a esmorrar sin remedio y trata de cogerla por los hombros para frenar su caída, cosa que consigue a costa de volar por encima de la bici y la niña y aterrizar con la cara en la carretera incrustandose,  para mas inri, las gafas. Tremenda ostia la del abuelo.
Efectivamente cuando le empezamos a curar las heridas llegamos a la conclusión de que probablemente se había roto la nariz y que había que ir a urgencias a que se lo mirasen.
La consulta en urgencias te cuesta de entrada 200$ ...luego ya si te tienen que dar medicación o hacerte pruebas de ahí para arriba. Le atendieron muy bien y rápidamente ( vamos, como si estuviese pagando) y efectivamente tenía la nariz rota y unas cuantas magulladuras. En este caso el seguro médico del abuelo en España le devolverá el coste de la visita en su totalidad y el abuelo que es la leche en una semana estaba como nuevo.

Tercera visita

Como ya os he contado alguna vez, al lado de casa tenemos dos maravillosos campos de rugby municipales a los que nos encanta ir con los niños a pasarnos la pelota y echarnos un partidillo.
En este caso la alineación era la siguiente: Papá, I y G contra Mamá, N y J. 
Como los dos mayores somos peor  que los niños en una jugada en la que estaba apunto de ensayar me vi arrollada por el tonto del haba de mi churri que me placó muy elegantemente abrazandome por detras, cayendo conmigo de espaldas y lanzandome posteriormente de forma que yo hice la voltereta con doble tirabuzón sobre mi cuello.
Ale, otra visita a urgencias.
Ni que decir tiene que allí les dije que me había caido jugando con los niños y no por culpa del gilipichis de mi marido, no vaya a ser que encima se lo llevasen al cuartelillo. Para darle más realismo a la cosa me lleve una muñeca blandita en el bolso que escenificaba perfectamente como me había escogotao. Pa vernos. Y la cara de la enfermera mientras yo sacaba a "Maria Luisa" y la hacía girar por los aires y decía " I did this" ...un poema.
Como ya sabeis por el hecho de saludarnos 200$. Me hicieron radiografías como para una boda otros 133$ y me pusieron un bonito collarín para mi maravilloso esguince cervical, otros 25$.
Por tanto que tu marido sea lelo y se venga arriba jugando una pachanguilla y te descoyunte, te sale por el módico precio de unos 358$.Una ganga.

Como veis, malo vendrá que bueno te hará ...así que aprovechad los que podáis para ir al médico antes de que desmantelen el chiringuito que yo ya estoy pensando en ponerme mala sólo cuando vuelva de vacaciones ;-).